“Amiga, amigo: sea que te hallas en luz o en oscuridad, Jesús resucitado está contigo, y te dice: “La paz contigo”. Sea que te encuentres alegre o angustiado, está contigo el crucificado resucitado, la presencia amiga de Dios que nunca te abandonará. Dos palabras de paz y una presencia divina que todo lo envuelve, todo lo llena, todo lo transforma: eso es la Pascua en medio de todas nuestras cruces. Aunque nuestros ojos están demasiado ciegos y nuestros oídos demasiado sordos, Jesús se nos aparece: “La paz contigo. ¿Por qué tienes miedo? Pálpame. Y marcha tranquilo. Vive feliz, y procura curar las heridas del prójimo”.
José Arregui.
José Arregui.
Gracias por este texto tan sencillo y profundo a la vez. Paz a tí, José Antonio y a todos los que siguen este blog. ¡LA PAZ CONTIGO! Una vez más es EXPERIENCIA de Pascua y de la pascua diaria... Una vez más es NUEVA, HOY y en cada nuevo acontecer donde Dios amanece y llena de luz algún rincón de nuestro ser. ¡FELIZ PASCUA!
ResponderEliminarGRACIAS POR TU CARTA!!!
Querido José Antonio y seguidores del blog:
ResponderEliminarHe vuelto hace un rato del monasterio y quería desearte/desearos una Feliz Pascua, y me encuentro con este texto tan bonito -¡incluso a estas horas, las cuatro y veinte!-. un gran abrazo con todo mi cariño. I.M.
Gracias a vosotras, que los frutos de esta Pascua os acompañen todo este año y toda vuestra vida.
ResponderEliminarun abrazo, en comunión.
Jesús se nos parece... Dios Humanado, punto de referencia de lo mejor que podía pasar a la humanidad.
ResponderEliminarUn abrazo. Pablo.
http://pmartimor.blogspot.com
Estimado José Antonio, Felíz Pascua.
ResponderEliminarQuise enviarte un mail para consultarte algunas cosas pero no puedo acceder a tu correo. Te dejo el mío para que me envíes tu dirección si es tu deseo. La consulta está relacionada a la vida contemplativa y lo vocacional. Muchas Gracias.
Fraternal saludo, Sergio.
sanbenito480@hotmail.com
Queridos Pablo y Sergio:
ResponderEliminarGracias a vosotros, os envío mis mejores deseos para esta Pascua, que Cristo, nuestro verdadero rostro esté siempre en vuestro camino.
Seguimosen comunión.
Gracias por cuanto en poco nos dice mucho.
ResponderEliminarCristo siempre ha resucitado, somos nosotros que no sabemos bién o no queremos resucitar con él. No lo terminamos de creer porque la vida cotidiana con sus prisas ofusca la vida espiritual que se encarga de decirnos, que si no somos constantes...nunca terminaremos de crecer ni llegar a resucitar ni tan solo una semana. La constancia es una virtud muy necesaria junto con el deseo del Amor para deverás resucitar.
Con ternura.
Sor.Cecilia Codina Masachs O.P
Muy inspiradas palabras, Sor Cecilia, la realidad Pascual nos envuelve y acoge entodo momento, nos llama y estimula el deseo de Dios, el motor para recorrer el camino y mantenernos siempre en él, por muchas vueltas que dé. Podemos apartarnos momentáneamente pero siempre hay que volver a la búsqueda que indica que ya hemos sido encontrados por El.
ResponderEliminarConstancia y deseo de Amar, dos estupendas piernas para caminar el Camino espiritual.
con cariño fraterno,
José Antonio.